No sé con certeza de donde sea originaria la 'Carne en su jugo', pero varias recetas que he visto en internet dan la idea de que es de por el rumbo de Jalisco, México. Este platillo lo empezó a preparar mi mamá hace apenas unos años cuando una señora de la iglesia a la que ella asiste le dio la receta.
El modo de preparación está bastante sencillo y los ingredientes supongo que también son fáciles de conseguir en cualquier supermercado.
Se necesita:
1/2 kg de carne de res, puede ser bistec, milanesa, pulpa bola o como lo conozcan ustedes.
Tocino, unas 4 o 5 tiras serán suficientes, es solo para darle el saborcito. Si no tienen tocino, se puede utilizar salchicha o jamón (como le hice yo esta vez).
Tomate verde o tomatillo, con unas 5 piezas pequeñas basta.
Apio, unas 3 varitas pequeñas
Cilantro, culantro o coriander, mas o menos un manojo pequeño.
1 mazo de cebolla cambray, cebolla de rabo, cebolleta o como sea que la conozcan.
2 chiles jalapeños desvenados y sin semillas, lo único que queremos es el saborcito, no el picante.
Sal y pimienta al gusto.
En este caso yo fui al super y compré milanesa de res, es un corte muy muy delgadito y que tiene la ventaja de que se cocina muy rápido. En este caso yo preparé carne como para unas 8 personas y de ahí que en las fotos se vea el doble de ingredientes que les puse en la lista jejeje
La carne se tiene que cortar en pedacitos, por lo que a mi se me hace mas sencillo enrollarla y cortarla en tiras y después en cuadros.
Debe quedar mas o menos así para que se cueza mas rápido, el chiste de esta comida es que puede estar lista para servir en 30 minutos o menos...
En fin, se pica el tocino (o 2 salchichas como le hice yo) y se pone a freír en un sartén, ya que suelta el saborcito, se agrega la carne al sartén.
A la carne se le pone sal y pimienta, yo les aconsejo ponerle poca sal, la verdad es que la primera vez que yo lo hice, le puse la misma cantidad que utilizo para otros guisos y salió demasiado salado, como que la salsa en que se cocina le resalta demasiado los sabores, así que esta ocasión poquita sal es mejor, total, si se les hace medio desabrido, siempre se puede agregar al final ;-)
Otra cosa muy importante, ya que la carne está cafecita y que se ve que soltó el jugo, hay que bajarle el fuego al mínimo y taparla, ahora si para que se cueza en su jugo.
Estos son los ingredientes a utilizar, cebolla cambray, cilantro, apio, chile jalapeño o cuaresmeño y tomate verde o tomatillo. Como les mencioné, yo aquí tengo el doble de cosas porque la comida era para 8 personas, ustedes ahí nomás le quitan la mitad.
A los chiles jalapeños les cortan el rabo y de ahí los parten a la mitad, con un cuchillo pequeño le pueden quitar las venas y las semillas que son lo picante, en este caso solo queremos el toquecito del sabor.
A los tomatillos se les quita el botón.
La cebolla cambray o cebolla de rabo, se corta en rodajas.
Una vez que la cebolla está cortada, se la agregan a la carne, se revuelve bien y se vuelve a tapar.
En la licuadora ponemos los tomatillos, los jalapeños, el apio y el cilantro con un poco de agua.
Se licua todo bien bien bien y tiene que quedar de un verde profundo y brillante!
Una vez licuado todo se le agrega a la carne y se deja hervir unos 10 minutos hasta que la salsa quede espesa, ya en este punto tendremos que checar el sabor y le pueden agregar sal si lo consideran necesario.
Dice mi mamá que al final el guiso lo pueden servir junto con frijoles de la olla enteros, yo la encuentro muy sabrosa así sola tal cual pero le pueden hacer de los dos modos.
De la presentación final ya no le tomé foto porque se me hacía tarde para el trabajo, pero les dejo esta foto que me pirateé de otro sitio jejeje, cuando vuelva a hacer la voy a sustituir.
Ahí si se animan a prepararla me cuentan como les quedó, yo la recomiendo para esas veces que ya se nos hizo tarde y que tenemos poco tiempo para preparar la comida, y queda D E L I C I O S A ;-)
Éste es un libro que lo vi ofertado en un Sam's Club hace ya varios meses. Desde el momento en que leí la sinopsis de la contraportada me atrapó, pero costaba la estratosférica cantidad de $199 pesos (unos 15 dólares) que en ese momento no me quería dar el lujo de gastar porque estábamos casi a fin de mes, y a veces 199 pesos son la diferencia entre ponerle gasolina al coche para 5 días o irte caminando al trabajo, además yo ya sabía que en esa tienda los libros solo tienen su precio original un cierto tiempo, pasado el tiempo reglamentario de exhibición, se tienen que ir, y es común que los pongan a veces incluso a menos de la mitad.
Unos cuantos días antes de salir de vacaciones, el roomie Edvan, quiso ir a esta tienda a buscar una bolsa de pistaches para llevarle a su papá (acá son mas baratos por alguna misteriosa razón), y cuando entramos, vi que habían movido los libros justo al lugar donde está la pasadera principal de la gente, y que voy viendo este en $99 pesos! Quiso la suerte que recién nos acabaran de pagar la quincena aquí en el trabajo y lo compré sin remordimientos! Además justo a tiempo para las vacaciones que es la única época del año que me puedo pasar los días enteros leyendo :-D
Por una de esas cosas raras e inexplicables que suceden en la vida, a mi me encantan ciertos tipos de libros.
A) Todas las historias que tengan que ver con judíos, o sea cualquier libro del Holocausto, de la fundación del Estado de Israel, del Mossad, etc, es bienvenido en mi librero.
B) Historias de blancos y negros en el sur de Estados Unidos, tipo 'Tomates verdes fritos' o 'Me muero por ir al cielo' (casualmente los dos libros son de Fannie Flagg).
C) Historias de chinos, en este caso había leído algunos de Amy Tan (todos sospechosamente parecidos) y todos me han encantado.
Fue por eso que este libro me hizo ojitos desde el primer día que lo vi, y pues como ya me iba de vacaciones, era el momento idóneo para leerlo durante el camino.
La sinopsis es la siguiente:
«Todas ellas quedaron viudas aquella noche del verano de 1944. A partir de entonces en el pueblo de Shitun hubo nueve viudas en plena flor de la vida…»
Ocho adolescentes se convierten en «viudas heroicas» tras liberar a ocho guerrilleros laoba de una muerte segura a manos de los japoneses. La novena viuda, Wang Putao, no recibirá los mismos honores que ellas. Huérfana desde muy niña, pasa a formar parte de la familia de Sun Huaiqing, un próspero comerciante, pero todo cambia tras el triunfo de la revolución comunista comandada por Mao Zedong.
De la mano de esta joven impulsiva y tenaz, Geling Yan retrata la compleja historia reciente de China. Las colectivizaciones agrarias, las purgas de la Revolución Cultural, las luchas internas de los dirigentes políticos, las disidencias y las represiones que cambiaron la Historia se alternan con las batallas cotidianas y las intermitencias del amor en la apasionante vida de Wang Putao.
Ahora mi propia impresión del libro: se me hizo entretenido de principio a fin, da muy buenos detalles acerca de la cultura y la idiosincrasia de los chinos de aquélla época, y aunque el final es un poco abrupto, yo no le pondría ningún pero si lo tuviera que volver a leer! O sea, sí se los recomiendo, si lo ven, cómprenlo! ;-)
Una de las razones por las cuales dejé pasar el tiempo sin escribir es porque me fui de vacaciones.
En teoría mi periodo vacacional es a partir del mes de Julio de cada año, y en este caso todavía no tomaba las del año pasado, de modo que apenas y pude desafanar algunos asuntos pendientes del trabajo, hice mis maletas y emprendí la huída.
Este año decidí ir a Chihuahua, una ciudad al norte de México donde vive una buena parte de la familia de mi papá. La última vez que estuve allá fue en 2008, y cuando regresé de aquél viaje, no pensé que sería la última vez que vería a mi abuelo. Me hubiera gustado mucho poder verlo aunque fuera una vez mas, pero desafortunadamente falleció en febrero de este año, y pues ahora si no quise dejar pasar mas tiempo sin visitar a mi abuela y demás familia.
La otra cuestión que me animó a ir, es que no iba solo, uno de los roomates es precisamente de esa ciudad, y como tenía la baja por incapacidad (se fracturó un brazo y lo tuvieron que operar y todo) se apuntó para el viaje porque él tampoco tenía idea de cuando podría volver a ir. Ya por lo menos el viaje en el tren no se me iba a hacer tan aburrido, y es que es pasarse todo el santo día, desde las 6 am que el tren sale de mi pueblo hasta las 11:30 pm que llega a Chihuahua, amén de que no es bueno viajar solo, ya ven que nunca falta que algo pase.
Así que el plan fue tomar un vuelo de aquí de Los Cabos a mi pueblo, y de ahí el tren a Chihuahua; en otras circunstancias hubiéramos tomado un vuelo directo, pero salía ofensivamente caro, por lo menos 3 veces mas de lo normal porque era época de vacaciones, y así nos salía a menos de la mitad.
Salimos de aquí un domingo a mediodía y llegamos a Mochis, mi pueblo, en menos de una hora. Por la tarde solo salimos un rato con uno de mis amigos y volvimos temprano ya que él debía trabajar al día siguiente. El lunes no estuvo muy diferente, un día muy tranquilo y una salida a cenar en la noche con mis amigos de la universidad que aún viven allí.
El martes tuvimos que madrugar, pues el tren salía a las 6 a.m y entre que hay que encontrar donde estacionarse, bajar maletas, cargar maletas, subirse al tren, pelear por unos asientos lo mas lejos posible del baño y del lado izquierdo porque es donde está la mejor vista, etc, pues hay que estar mucho antes. Me levanté temprano, a las 4 de la mañana, y con todo, apenas si alcanzamos a llegar a tiempo a la estación, solo para encontrarnos con que había un 'gentío de gente', ya que era uno de esos días en que el tren de primera y el 2do salen en el mismo convoy, y bueno, 18 vagones esperaban para llenarse...
Cuando estaba a punto de poner un pie en el andén, recordé que no traía un centavo partido por la mitad en la cartera, años de estar acostumbrado a pagar casi todo con la tarjeta de la nómina hacen que a uno se le olvide que debe cargar por lo menos unos 100 pesos en efectivo por cualquier emergencia. Afortunadamente Edvan se las arregló para llegar hasta el cajero automático y regresar a tiempo, ya que cosa curiosa, a pesar de que había una multitud de gente esperando para abordar tan solo 10 minutos antes, el tren salió puntual a las 6 de la mañana.
En la ruta Los Mochis-Chihuahua, las primeras 6 horas del recorrido son bastante anodinas, casi casi que son solo para comprobar que la desidia de la compañía ferroviaria no tiene límite cuando de arreglar las vías se trata, hace 10 años hice el recorrido y tomó 3 horas recorrer 90 kilómetros entre Los Mochis y un pueblo que se llama El Fuerte, al parecer las vías están en mal estado en ese entonces, y resulta que 10 años después siguen en mal estado, lo bueno es que el paso lento del tren lo arrulla a uno y se puede dormir plácidamente si se tomó la precaución de llevarse una almohada y una manta pequeña, ya que a pesar de ser pleno julio, adentro del tren hace un frío que cala.
Después de un rato, el tren empezó a hacer su entrada a lo que es la Sierra Madre Occidental, entre los estados de Sinaloa y Chihuahua, y ahí es donde el paseo se pone interesante, porque se ven unos paisajes increíbles, amén de que el tren hace la mayor parte del recorrido a lo largo del borde de un barranco!
Pensaba subir mis propios videos, pero no traía la camarita a mano, y total, el paisaje es el mismo así que me permití tomarlos prestados de otro usuario jejeje
Aquí se puede ver cuando el tren pasa sobre el puente Chinipas, el mas alto del recorrido, 102 metros, casi no se alcanza a apreciar la altura, pero en vivo es espeluznante, imaginen que alguien cayera de ahí y dudo que lo volvieran a encontrar!
Aquí en este otro video se puede ver el puente mas largo del recorrido, el Aguacaliente, casi 500 metros, tengo entendido que aquí es parte del embalse de la presa Huites (o Luis Donaldo Colosio).
Por ahí de las 12 del día llegamos a Témoris, un lugar enclavado en el mero corazón de la Sierra, ahora si que en medio de la nada, de qué vive la gente ahí? Ni idea!
El tren hace una vueltotototototota a través de las montañas para subir, hay una cascada muy padre que cae de la montaña.
Creo que la cascada se llama 'Velo de Novia.
Una toma un poco mas alejada donde se puede ver un nivel mas bajo de la vía.
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De ahí en adelante el viaje se me hizo mas entretenido, el aire infinitamente mas fresco y todo varios tonos mas verde de lo que estoy acostumbrado a ver yo en este desierto donde vivo.
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Por ahí de las 4 de la tarde llegamos al Divisadero, que es una estación que marca la mitad del recorrido. Justo ahí se encuentran las Barrancas del Cobre, y se ven a muchos Tarahumaras vendiendo artesanías y cosas de por el rumbo como manzanas y piñones. El tren se detiene únicamente por 15 minutos, por lo cual apenas da tiempo de bajar, correr a la orilla del barranco, sacarse la foto, husmear entre los puestos del mercadito, quizá comprar alguna 'gordita' para comer y correr de nuevo al tren cuando vuelve a pitar, y créanme, que eso de 'el tren no espera a nadie' es verdad.
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Al bajar del tren, ahí pueden ver todos los puestos de fritangas típicas de ahí.
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Una vista medio soleada del mercadito donde venden artesanías que se pueden conseguir en prácticamente cualquier parte de México.
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Justo en el borde del Divisadero...
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Aquí el otro lado del panorama...
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Lo siento, es mi primera camarita que toma fotos panorámicas y por eso las saqué casi todas así!
Cañón del Cobre/Barranca del Cobre 1
Cañón del Cobre/Barraca del Cobre 2
Cañón del Cobre/Barranca del Cobre 3
Cabe mencionar que el Cañón del Cobre es 5 veces mas grande que el Grand Canyon!
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He estado en este lugar muchas veces, y siempre digo que algún día volveré con mas tiempo, pues 15 minutos no parecen suficientes mas que para medio ver el paisaje y mal tomarse una foto.
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A los 15 minutos exactos el tren volvió a pitar y apenas si alcancé a que me empacaran unas 'gorditas' que compré para comer, no es por nada pero estaban riquísimas!
Nuevamente uso un video de Youtube porque si ya está en línea, para que gastar mas espacio verdad? XDaa
Poco después llegamos a Creel, un pueblo turístico donde los haya, enclavado en un paisaje muy bonito y lleno de hostales, cabañas y narcos (...pero esa es otra historia). Ahí el tren únicamente se detiene para subir y bajar pasaje, según por seguridad no se le permite al resto de los pasajeros bajar, total, para 5 minutos ni alcanzan a ver nada. Aquí lo que hice fue aprovechar que nuevamente había señal en el celular y avisar donde iba, igual por fin pude conectarme a internet en el iPad y comprobar que a pesar de ser vacaciones, la gente sigue y sigue y sigue mandando correos por mas que dejes un aviso automático que diga 'ESTOY FUERA DE LA OFICINA'...
De Creel en adelante el recorrido se hace un poco tedioso, mas que nada porque ya empieza a oscurecer y no se alcanza a ver ya casi nada, amén de que se sale de la Sierra y solo se ven campos, campos y mas campos sembrados de cualquier cosa.aa
Me fui casi todo el resto del trayecto leyendo 'La novena viuda' de Geling Yan, un libro que a mi en lo personal me gustó mucho y que les platicaré del mismo en otra entrada.aa
Por fin llegamos a Chihuahua a eso de las 11:30 de la noche, apenas divisamos las luces y se soltó un aguacero de aquéllos que pocas veces se ven aquí en Los Cabos. El tren tarda mas o menos una media hora desde que entra a la ciudad hasta que se detiene finalmente en la estación.aa
Al llegar ya nos estaba esperando la familia de Edvan, muy contentos de verlo después de año y medio, eso si, casi les da el infarto cuando les platicó del accidente que tuvo y les enseñó la cicatriz en el brazo.aa
Una de las cosas que tiene la gente oriunda de Chihuahua es que no importando la hora que sea, si llegas a una casa, te ofrecen de comer y se ponen a cocinar si es preciso; con nosotros no fue la excepción, aunque la verdad después de un día entero a bordo del tren lo que quería era dormir, pero pues les acepté un pan con leche y estuvimos platicando mas o menos hasta la 1:30 de la mañana. Finalmente me dijeron que iba a dormir en tal habitación y dejé mis cosas, me lavé la cara, los dientes, apagué la luz, me acosté y me morí hasta el día siguiente.