martes, 31 de diciembre de 2013

La última del año!

Después de unos cuantos mesecillos de ausencia (que nadie se da cuenta de todos modos jejeje), me vuelvo a apersonar por aquí para despedir el año.

Fue un año que trajo de todo, sobre todo trabajo para mí y la verdad no me quejo, bueno, no salí de vacaciones, pero por lo menos me deben muuuuchos días ;-)

Todo hubiera apuntado para ser un año excelente de no ser porque apenas este fin de semana falleció uno de mis primos allá en Chihuahua, se le apagó el calefactor de gas durante la noche y el pobre no amaneció para contarlo, me consuela un poco saber que por lo menos no sufrió, pero de ahora en adelante será un poco triste llegar a estas fechas y saber que él ya no va a estar con nosotros, pero bueno, así es la vida y trae de todo y no nos queda de otra que seguir adelante.

Como dice una canción de Mecano que me gusta mucho para estas fechas, que 'aunque para las uvas haya algunos nuevos, a los que ya no están echaremos de menos', y eso es lo que pido para el 2014, que todos sigamos por aquí y que tengamos lo suficiente, no de mas y no de menos, sólo lo suficiente ;-)

Un abrazo!

Feliz año nuevo!


miércoles, 30 de octubre de 2013

El grupo de teatro

Creo que alguna vez escribí una entrada acerca de cuando estaba en un grupo de teatro infantil, allá por 1991, bueno, en realidad estuve en tres, uno que era los sábados, otro al que fui por un breve tiempo en las noches y todos los demás eran adultos y ooootro que era entre semana, pero hoy les platicaré del que era entre semana porque era (y por mucho) el mas extraño...

Todo comenzó porque yo iba los sábados a un taller de lectura infantil en el museo regional del rancho.
Un día apareció una cartulina en la entrada del museo en donde nos invitaban a ver una obra en el teatro del Seguro Social, era un domingo en la mañana así que mi papá nos llevó a mi hermana y a mi.

La obra se llamaba 'El Payaso Dudín y sus muñecos', en realidad el título estaba mas laborioso que la trama de la obra, que no tenía la menor complicación en su argumento, era como si el autor hubiera querido hacer algo mas digerible que una película de Disney a la 1:55 de la tarde y le urgiera salir a comer a las 2 en punto.

Trataba sobre un payaso pobretón en una especie de taller, donde había un montón de marionetas/muñecos (nosotros) tirados en el suelo, se quejaba de no tener amigos y que se aburría mucho. De la nada, escucha una voz que le dice -Amigo! Amigo!- y cuando pregunta quién era, Zaz! uno de los muñecos cobra vida y le saca plática y empiezan a jugar con unos muñecos de guiñol, igual cantan una ronda infantil y mágicamente otra de las muñecas en el suelo también cobra vida, y bueno, entre canción y canción los otros 'muñecos' se levantaban del suelo, cantaban como dementes, bailaban como estúpidos una serie de rondas infantiles antes de caer de vuelta al suelo cuando el libreto lo requería. Dudín terminaba quejándose nuevamente de que los niños ya no salían a jugar como antes, que se la pasaban viendo la 'caja mágica' (televisión) y que ya no jugaban esos 'juegos tan maravillosos de antes'. Menos mal que el pobre no podía haber previsto la invención de las tablets y la evolución de los teléfonos móviles porque sin duda se habría pegado un tiro ante el negro porvenir.

Al final de la obra los actores se presentaron de uno por uno en el escenario, y el director del grupo dijo que estaban por iniciar otro curso, y que harían convocatoria para aceptar nuevos integrantes.

Mi hermana se quiso apuntar en el grupo porque al parecer en su clase de 'Educación Artística' de la secundaria, la maestra les ponía puntos extra si se apuntaban en alguna actividad extraescolar relacionada con el tema, así que no solo mi hermana fue, también se apersonaron varias de sus amigas de la escuela.

El lugar estaba relativamente lejos, alláaaaaaaa mas lejos del centro, y era una instalación también del IMSS en dónde impartían cursos de cocina, de manualidades, de karate, de gimnasia artística, de corte y confección y creo que de cultura de belleza. El lugar al parecer era muy exclusivo porque no te dejaban entrar si no tenías tu credencial. Ahí nos tuvieron esperando hasta las 4 de la tarde cuando nos dejaron pasar y entramos a un saloncito que estaba pegado con una guardería, porque se escuchaba un escándalo detrás de unos libreros que habían puesto a mitad del lugar para dividirlo.

Creo que fueron dos días en que nos pusieron a hacer ejercicios dizque de dicción, de expresión corporal y demás, y según al tercer día nos iban a decir quién se había quedado y quién no (háganme el refrabrón cavor, ya ni en el Actor's Studio se la han de dar de tanto paquete).

Resultó que yo si pasé el casting y me quedé, a mi hermana y a sus amigas simplemente no les interesó regresar a pesar de que también se quedaron, así que de lunes a miércoles, yo solito me iba al taller de teatro, que en realidad era solo una excusa para salir de casa y sentirme independiente porque a mis 8 años ya no me daba miedo andar solo en el bus.


A las pocas semanas de estar ahí me dieron mi credencial, con tan mala suerte que justo el día que me la dieron, parece que el IMSS cambió su política de exclusividad y ya no la pedían para poder entrar, mala suerte, y yo que me las quería dar de importante jejeje

No tardé mucho en hacer amistad con los demás chamacos de ahí del taller, las 2 horas se me pasaban volando y en las veces que el maestro faltaba (que no era inusual), nos salíamos a hacer bromas desde los teléfonos públicos que estaban en la explanada que por alguna razón, tenían línea abierta. No servían para hacer llamadas de larga distancia, pero las llamadas locales parecían ser ilimitadas, así que nos la pasábamos de lo lindo importunando a la gente, que me sorprendía que cayeran con tanta facilidad en bromas ya muy gastadas. Por ejemplo, nos llevábamos el número de carnicerías, papelerías y hasta funerarias, y por ejemplo

-Hablo a la carnicería?
-Si
-Tiene patas de puerco?
-Si
-Pues láveselas!

O alguna otra como:

-Hablo a la papelería?
-Si, qué se le ofrece?
-Tiene chinches (tachuelas)?
-Si
-Ay pos que cochina!

A veces también llamábamos a alguna casa al azar, e igual:

-Si bueno?
-Disculpe, ahí lavan ropa?
-No
-Pues que puercos eh!- y colgábamos doblados de la risa.

Después también descubrimos que esos teléfonos eran una fuente casi inagotable de dinero, pues un día que le dimos un golpe sin querer, nos devolvió una moneda de 100 pesos. Ahora, 100 pesos de aquél entonces a lo mucho alcanzaban para comprar un chicle, pero que tal cuando después de estarle dando y dando y dando golpes te daba $1500? Uhhh nos sentíamos millonarios!



Así transcurrió todo con normalidad mas o menos hasta el mes de mayo (habíamos comenzado a ir en febrero), y fue entonces cuando nos dijo el maestro que iba a venir otro grupo similar al de nosotros de allá de Culiacán, se llamaban 'El Club de la Banana Vieja', y venían viernes, sábado y se regresaban el domingo. Nosotros a lo mucho éramos 12, pero los de aquél grupo fácil eran como 50.

El primer día que estuvieron ahí, tuvieron una presentación en el desaparecido Cinema 70 que hacía las veces de teatro cuando se ocupaba, creo que allí presentaron una mini obra que se llamaba 'La última ave del paraíso', ese día yo no fui, pero recuerdo que otra de las niñas del grupo mas pequeñas nos contó que después de la obra ya que se había vaciado el cine y que nomás quedaban los del grupo, algunas de las chicas mas grandes del grupo se pusieron a bailar y corretear sobre el escenario, con la diferencia de que salieron DESNUDAS, sí, así encueradas/bichis/a ráiz/en pelotas/como Dios las trajo al mundo.

El sábado fue cuando ya pude ir y resulta que iban a dar una función gratuita en la tarde, y pues ahí los pude conocer mejor. Resulta que todos absolutamente todos estaban entrenados como payasos, hasta los mas chicos; sabían hacer malabares, caminar de manos, hacer figuras con globos y se sabían unos chistes muy buenos además de actuar.

Dieron una función en donde presentaron algunos actos de malabarismo y de ejercicios gimnásticos, además de unos sketches comiquísimos con los que me reí hasta que me dolió el abdomen.

Al día siguiente que nos tocó a nosotros presentar la obra esta del payaso, ellos nos ayudaron con la caracterización y a montar la escenografía, cuando terminamos, todos ellos muy profesionales nos fueron a felicitar.

Lo que no me gustó de la visita de ese grupo, fue que el maestro de nosotros quiso adoptar algunas de sus costumbres, que hasta el día de hoy me siguen pareciendo muy controversiales.

Por ejemplo, los chamacos de ese grupo eran muy desinhibidos, y por desinhibidos me refiero a que lo que había visto mi compañerita en el cinema (que andaban encueradas y todo) no era casualidad, sistemáticamente los entrenaban para que no les diera vergüenza desnudarse, que porque 'en el teatro la vergüenza estorba'. También eran medio pesaditos para jugar, tenían esta dinámica llamada 'El cochi bichi', que consistía en que quien perdía un juego, tenía que bajarse los calzones y gatear entre las piernas de todos los demás puestos en fila que le daban de nalgadas mientras pasaba, en fin, gente loca con ideas mas locas.

Tiempo después nos tocó a nosotros ir a Culiacán a presentar la obra de teatro del payaso. Es la hora que me sigue sorprendiendo lo confianzudos que eran mis padres al dejarme ir así nomás como así, igual como íbamos muchos y solo era por un día no les dio mucho pendiente; creo que años después, la razón por la cual se pasaban de controladores conmigo fue para compensar esos viajes que hice!

Allá en Culiacán todo muy bien, como la presentación de la obra era hasta la tarde, nos llevaron al zoológico, al parque, y por alláaa a las quinientas nos llevaron al teatro del IMSS que estaba un poco mas amplio que el del rancho.


La verdad no me acuerdo de qué tanto público había, pero como no cobramos la entrada, a la mejor y eso nos ayudó. El regreso si fue un poco mas apresurado porque apenas si nos dio tiempo de quitarnos el disfraz antes de salir corriendo para la terminal de autobuses.

Llegamos al rancho por ahí de las 9 de la noche, nos bajamos antes de llegar a la central porque a esas horas ya no circulaba el bus y la caminata iba a estar mas larga. Por suerte varios vivíamos por el mismo rumbo, así que no hubo problema, llegué a mi casa sano y salvo.

Poco menos de dos semanas después ocurrió la tragedia cuando una de las chicas del grupo murió ahogada en el río (en junio). Se suponía que en septiembre volvíamos a empezar, pero la mayoría ya no regresaron, y pues la verdad en las dos veces que regresé, el ambiente ya se notaba muy raro y muy tenso, terminé diciéndole a mi mamá que ya no quería ir y me dijo que estaba bien.

No tengo ninguna fotografía de esos tiempos, no sé si alguno de los otros del grupo tenga, pero no volví a saber de ninguno de ellos; en fin, creo que difícilmente se me olvidarán esos tiempos en que me divertía como enano haciéndole al artista!



sábado, 26 de octubre de 2013

La vez que fuimos a hacer el ridículo cantando el himno...

Hace ya como 20 años, yo estudiaba la primaria en un colegio de medio pelo. 

A pesar de que a 100 metros de mi casa había no una sino dos (DOS) escuelas primarias, mi mamá prefirió mandarme a un colegio que estaba en el centro. Nunca supe quién se lo recomendó ni como fue que yo y mi hermana terminamos allí, pero las razones que daba mi mamá era que en un colegio particular a los chamacos les prestaban mas atención, amén de que ellos como padres, podían exigir que hubiera buenos maestros y por lo tanto buenos resultados.

Aquí entre nos creo que lo que no le gustaba de las dos escuelas públicas que estaban, literalmente, a un tiro de piedra de la entrada de la casa, era que los maestros eran algo irresponsables; para empezar la salida era a las 12 del día, y en mi colegio salíamos a las 12:45, ni un minuto antes. Acá en estas escuelas no era inusual que si la maestra por ejemplo tenía que ir a hacer sus pedidos del 'Avon' antes de las 12 (porque si no, no le llegaba el producto que le habían encargado) pos se iba temprano y ya, al cabo que no había fijón, así que a las 11:30 los niños ya andaban correteando en la calle a esa hora. Esa y otras cosas fue lo que causó que mis padres hicieran el esfuerzo extra de pagar el colegio particular.

Como les dije al principio, el colegio era de medio pelo, es decir, no era uno de esos colegios nice con instalaciones de primer mundo y toda la cosa, no, era mas bien como para gente clasemediera, que si bien no era millonaria, se podía dar el lujo de pagarlo (aunque si había gente con lana que ponía a sus hijos ahí). Total, las clases eran constantes, los maestros bastante bien preparados, y al empezar ese año, nos salieron con la novedad de que una vez a la semana nos iban a dar clases de música o de danza un día a la semana.

A mí lo del baile nomás no se me da, menos los bailes típicos regionales, que era de lo que iba la clase principalmente, así que desde el principio me apunté en clases de música, no es que tuviera talento alguno para eso tampoco.

Las clases según eran los martes de 1 a 2 de la tarde. La primera semana el maestro nos dejó plantados, ni sus luces; lo raro fue que la siguiente semana tampoco llegó. Fue hasta la tercera semana que finalmente lo conocimos, era un cuate con finta de contador desnutrido, que de música y de dar clases no tenía NPI, háganse de cuenta que a mí me dieran trabajo de maestro de química nomás porque me acuerdo de algunos elementos de la tabla periódica, así de ese nivel eran las credenciales de ese amigo. Lo mas seguro es que le hubieran dado el trabajo porque era pariente del director, de otro modo no me explico cómo mantuvo el empleo a pesar de que solo se presentaba una vez al mes (y eso en un buen mes).

A nosotros no nos importaba gran cosa, era una hora extra que teníamos para jugar a la salida de la escuela. En las poquísimas veces que el maestro se presentó, le hizo al cuento de que nos iba a enseñar a tocar la flauta, pero la verdad, ni siquiera él sabía. Yo mas o menos aprendí a tocar algunas tonadillas simples porque mi hermana iba a clases por las tardes a ooootra escuela, aunque ella y sus amigas iban mas que nada por salirse de casa y echar relajo fuera de la escuela. 

Así transcurrió la mayor parte del año, hasta que mas o menos ahí por el mes de febrero, nos avisaron que iba a haber un concurso del himno nacional entre los colegios de la zona (la 090), que básicamente eran todos los colegios con mas de 30 años de antigüedad, así que nuestro colegio de medio pelo se iba a codear con otros colegios de medio pelo y algunos otros mas nice como el 'Sor Juana',  el 'Montferrant' y los fresitas 'del cerro' (en realidad se llama Centro Escolar del Noroeste, pero como estaba al pie del único cerro de la ciudad, así se les conocía).

Como por arte de magia, el maestro reapareció, y nos dimos a la tarea de aprendernos toooodo el himno nacional mexicano. Normalmente los lunes durante los honores a la bandera se canta una versión reducida del mismo, pero para el concurso nos lo teníamos que aprender TODO, y no estaba para nada corto ni exento de palabras que yo jamás había escuchado como 'pendones', 'blasones', 'inermes' u 'horrísonos'.

El otro problema era que ninguno de nosotros lo había escuchado cantado completo, así que nos lo aprendimos como Dios nos dio a entender, ya que como les comenté, el maestro era un completo inútil; les explico, algunas estrofas del himno traen unos versos que se repiten dos veces al final, por ejemplo:

Mas si osare un extraño enemiiiiigo
prooofanaaar con su plaaanta tu sueeeelo,
piensa oh patria, querida, que el cieeee-eelo
un soldado en cada hijo te dio - y aquí el redoble - Uuu-uun soooldaaado en cada hiiijo te dioooo-

Y como a nosotros nadie nos dijo nada, pos le agregamos una repetición a TODAS las estrofas en su verso final.

No fue sino hasta dos días antes del concurso que al inútil del maestro se le ocurrió conseguir un disco de esos de vinil con la versión oficial, y con horror descubrimos que nos lo habíamos aprendido mal. Ahora, traten de corregir algo que habíamos venido ensayando erróneamente durante mas de un mes en dos días, pues simplemente no se puede (a menos que vivas en Corea del Norte).

Nos hicieron ir en la tarde los dos días anteriores a ensayar y ensayar como dementes la versión corregida. No atinamos a cantarla sin errores ni una sola vez, siempre había algún despistado al que se le iba el rollo y cantaba el último verso dos veces.

No están ustedes para saberlo ni yo para contarlo, pero modestia aparte, yo tenía el mejor promedio de la escuela en esos tiempos, así que en teoría me correspondía el 'privilegio' de dirigir el coro, e incluso vino el 'maestro' y me preguntó:

-M'hijo, cómo te sientes para dirigir?-
-No gracias, me siento mas seguro estando en el coro con mis compañeros - eufemismo para 'Ni madres cabrón, a ni no me vengas a embarrar con tu incompetencia para que luego me eches la culpa!'.

Finalmente el condenado concurso se llegó, fue un viernes 12 de marzo de 1993 en el auditorio de un colegio de otra ciudad que estaba a poco menos de una hora de camino.

No recuerdo en que orden nos tocó pasar, pero cuando nos tocó a nosotros, como era de esperarse, fue un desastre, pues por mas que habíamos ensayado las horas extras, varios nos equivocamos por la inercia que ya traíamos de repetir los últimos versos de cada estrofa.

Al final el jurado anunció los tres primeros lugares, y aunque nunca dijeron el orden en que habían quedado los demás, estoy seguro que quedamos en el décimo lugar (de 10 colegios participantes!).

Saliendo de allí, nos llevaron a dar la vuelta al río Sinaloa, que estaba relativamente cerca. Yo ya ubicaba el lugar porque cuando íbamos a visitar a mis abuelos en Angostura, siempre pasábamos por el puente que cruzaba ese río unos 10 metros encima, pero mi papá siempre iba a la carrera y nunca se había detenido para que llegáramos. 

Al parecer todas las mamás habían tenido la consideración de empacarles el almuerzo a sus hijitos para que no batallaran, bueno, mi mamá no, así que me quedé como el chinito 'nomas milando', porque no había ni un triste puesto ambulante donde comprar por lo menos unas papitas o un emparedado.

Mas o menos a las 3 de la tarde emprendimos el regreso, que ya estuvo mas animado. La verdad no nos importaba en lo mas mínimo haber quedado en el último lugar, total, nos habíamos divertido mucho. Incluso todavía en el regreso, pasamos por enfrente de un vivero, y nos detuvimos ahí y compramos unas plantas. Yo me acuerdo de haber comprado una 'petunia', que resultó ser una planta muy corriente y fina a la vez. Corriente porque costó 2 pesos, y fina porque requería demasiada atención, eso sí, daba unas flores muy coloridas la condenada.



El día no terminó tan mal, resultó que iba a ser cumpleaños de otro amiguito, y le hicieron fiesta, así que apenas llegando a casa, me cambié y nos fuimos. Ahí me desquité de que no había desayunado ni comido, habían hecho tacos a vapor, pastel, gelatina y comí como un cerdo ;-)

En cuanto al maestro de música, no lo volvimos a ver, supongo que después de haber hecho semejante ridículo, el director finalmente decidió prescindir de sus servicios, o como dirían mis huéspedes gringos: -They fired his sorry ass!-.


miércoles, 14 de agosto de 2013

De tostitos preparados y señoras lesbianas.

Hace algunos días, unos amigos y yo nos estábamos acordando de aquéeeeeeellos cada vez mas lejanos años de cuando estábamos en la universidad.

Si me preguntan que extraño mas de mis años escolares, yo creo que 'el convivir con mis amigos' empataría con 'comer todas las chucherías que vendían afuera de la escuela' :-)

Y es que no saben como extraño aquéllos días en que podía comer ese tipo de cosas, aquí en este rancho grande donde vivo ahora la gastronomía es un poco mas variada porque vive gente de todo el país, pero a veces extraño poder comer tostitos o churritos (Satélite!) preparados.

Que son? Básicamente una bolsa de Tostitos/Churritos costada a lo largo, se le pone chamoy, salsa picante, cacahuate japonés (que de japonés tiene lo que yo de alemán), salsa valentina (muy picante), polvito tajín, y para dale el toque saludable, pepino cortado en cuadritos. Una bomba para el estómago, pero de un sabor irresistible! Yo nomás daba la primera cucharada y sentía como me ardía la cara!



De entre todos los lugares que había para surtirse de chucherías, estaba el micro changarro que tenían un par de señoras, que además de preparar los mejores churritos o tostitos preparados que yo he comido jamás, eran lesbianas.

En mi corta existencia, yo jamás había conocido a mujer lesbiana. Alguna vez mi mamá mencionó que una ex-vecina, la Patty, tuvo un breve período lesbicurioso cuando estaba jovencita, pero que luego se le pasó, se casó, tuvo hijos y todos tan felices como siempre.

Yo en aquél entonces me imaginaba que las lesbianas eran mujeres feas, corpulentas, que se vestían de hombre, que trabajaban de leñadoras o de mecánicas y que eran amantes de iniciar pleitos de cantina a la menor provocación (cierto que también habrá mujeres heterosexuales que encajen en esa descripción).

Estas señoras no eran precisamente así, las dos pasaban ya de los 40 años, una de ellas era un poco regordeta, morena, usaba base, polvo, rimel, delineador y labial, siempre andaba bien peinada y con su pulserita y sus pendientes, muy femenina siempre doña Isabel. 

La otra señora era un poco mas alta, delgada, bronceada y un corte de pelo muy estilo de Laureano Brizuela; sin gota de maquillaje, y se vestía siempre con pantalones, tennis y camisetas amplias. 

Laureano Brizuela 'El ángel del Rock'


La señora 'Laureana' , era la mas amable (y hasta encantadora) de las dos, siempre se le notaba una genuina alegría cuando llegabas a su puesto a comprarle algo, hablaba muy propia, con el vocabulario de alguien que ha estudiado o que por lo menos ha leído (y entendido) mucho. Siempre estaba de buen humor (la otra señora no siempre), en lo que te servían las cosas te preguntaba como te estaba yendo en la escuela, los exámenes, y cuando te ibas siempre te desaba suerte 'y que Dios te bendiga!'.

Una vez fueron al Walmart donde yo trabajaba a comprar una televisión en mensualidades, querían comprarla con una tarjeta de la tienda (Tarjeta que redefinía el concepto de 'usura' por cierto). El caso es que la compra no pasó, creo que el valor de la tele excedía como por $100 pesos el monto de la línea de crédito que tenían, así que en el inter de que la supervisora fue a solicitar la autorización por teléfono, doña Laureana se puso a platicar conmigo. Ahí supe como se llamaba, y tenía un apellido que yo nunca había escuchado, y ya me contó que ella era de Guadalajara pero que ya tenía muchos años ahí en el pueblo, incluso sacó su credencial de estudiante y se puso a contarme dos que tres anécdotas de aquéllos tiempos, y bueno, tan amena estaba la plática que la supervisora regresó y se quedó escuchando un buen rato y a las quinientas cayó en cuenta de que les tenía que decir que no les habían autorizado la compra y que le daba mucha pena. Doña Laureana dijo que no había ningún problema, que a la mejor era una señal del universo porque no estaba muy segura de quererse encharcar por un año con una deuda, etc, etc. 

Ya que se fueron la supervisora me dijo:

-Aaaawww, que señora tan agradable!
-Si, la verdad que sí, yo las conozco de ahí del Tec y sobre todo esta señora del pelo chino es muy amable.
-Neta que hasta da pena no poderles ayudar no?
-Si verdad?
-En fin, ojalá que a la otra si les pase la tarjeta!

Alguna vez entró a trabajar aquí al hotel una chica que tenía el mismo apellido que doña Laureana, hasta estuve tentado a preguntarle si era pariente suya o algo, no hubo mucha oportunidad de preguntarle, pues la chica renunció a los tres días porque se asoleaba demasiado y acabó del color de una berenjena.

En fin, ahora que lo pienso, nosotros nomás especulábamos que eran lesbianas y pareja, a la mejor y no eh, aunque mi amiga Raymunda llegó a la conclusión de que vaya si eran lesbianas y que además tenían muchos años juntas una vez que presenciamos una discusión entre ellas. 

Estábamos esperando el bus, y a escasos metros estaba el puesto de las señoras, escuchamos una discusión airada entre ellas, de repente doña Laureana dijo en voz muy alta:

-Es que no es como tú dices!
-Pues no me interesa, me largo! - dijo la otra señora, tomando su bolso y emprendiendo el camino.
-Pero como te vas a ir y me vas a dejar aquí sola? No me puedes dejar así!!!! Isabel!!!

Allí la vimos, con las manos cubriéndose la cara como aguantándose las ganas de llorar o de hacer una pataleta, pero se serenó. Cerró el changarro y se montó en una bicicleta y se fue, seguramente a alcanzar a doña Isabel.

-Ves que si son lesbianas? - me dijo Raymunda.
-Ay como eres de argüendera, a la mejor nomás son socias, o primas o qué se yo?!
-Eres o te haces? las mujeres no reaccionamos así por una socia, prima o amiga. Son pareja, y seguramente por algo se puso celosa doña Isabel, ya verás que tengo razón.

Ya no he regresado por esos rumbos desde que salí de la escuela, así que desconozco si aún sigan con el changarro o si sigan juntas, pero a ver si ahora que regrese me da tiempo de ir, a por unos tostitos y saludarlas de pasada :-)


domingo, 16 de junio de 2013

Felicidades a mi Apá!

Hoy que se festeja el día del padre aquí en México, aprovecho para felicitar a mi papá, aunque nunca le he dicho que tengo un blog, es mas, creo que ni le voy a decir, capaz que se viene a enterar de cosas que nunca le he contado :-P

Mi papá siempre fue un excelente padre, muy cariñoso, buen proveedor y ahora con el paso de los años, me doy cuenta de que por lo general solía tener la razón aún cuando yo insistiera en que no.

Recuerdos bonitos tengo muchos, por ejemplo los domingos en la tarde (que eran por lo general el único día de la semana que podía decirse que descansaba) cuando él estaba echando la siesta yo tenía la mala costumbre de querer ir a un parque que quedaba a tomar por culo de casa (o sea muy lejos), a eso agréguenle que el lugar era bastante polvoso y ruidoso, además creo que no había ni siquiera una triste banca para sentarse, solo juegos. Con todo, mi papá siempre me llevaba, se iba renegando todo el camino, pero no por eso dejaba de llevarme, incluso cuando ya veníamos de regreso, hasta me llevaba por un helado.

Mi papá también solía hacer las mañanas de los domingos menos tenebrosas. Cuando mi mamá insistía en llevarnos a misa a las 8 a.m (que flojera!) y que yo por supuesto, no quería, mi papá creó la tradición de ir a desayunar a la birria o a los tacos a vapor saliendo, y bueno, eso hacía mas llevadera la tortura de tener que ir a un lugar mal iluminado, lúgubre y tenebroso que además olía a una mezcla entre alcanfor y humo de velas.

Entre otras cosas mi papá siempre fue muy creativo; yo era de esos niños que suelen obsesionarse con X cosa por temporadas, y cuando estaba en segundo de primaria, vi una película de 'Alvin y las Ardillas' donde recorrían el mundo en globos aerostáticos, pues igual, un día llegué con una bomba (o globo de goma) que compré en el abarrote y le pedí un pedazo de hilo a mi papá para hacer uno como el de la película, y mi papá que tenía mejores ideas, en un santiamén entretejió los hilos para hacer una especie de red en donde se ponía el globo y en la parte de abajo puso una barquilla que anteriormente había sido la tapa de una caja de zapatos y voilà, ya tenía un globo donde cabían perfectamente mis monos de fisherprice! Uuuhh no, me volví loquito lo que restó del día.



Igual, años después cuando se pusieron de moda 'Los Caballeros del Zodiaco', mi papá con toda la paciencia del mundo me llevó a una ferretería a comprar una cadena de plástico amarillo que fue la sensación entre los otros niños de la cuadra porque jugábamos a que era 'la cadena de andrómeda'.



Cuando entré a la edad horrible de la adolescencia, mi papá y yo nos distanciamos un poco. Entre la rebeldía propia de la edad y la mala influencia de unas enseñanzas de ultraderecha en la iglesia a la que íbamos, tipo Tus hijos te tienen que obedecer en TODO y si no entonces haz valer tu autoridad como padre y disciplinarlos (o sea madréatelos/golpéalos amorosamente). La verdad es que mi papá tenía la paciencia de un santo conmigo, y solo en una ocasión perdió los estribos y me dio unos tablazos, ante la mirada complaciente de mi mamá (rayos, ya hasta había bloqueado ese recuerdo!), pero esa es otra historia, que según mi terapeuta, tengo que exorcizar para poder dejar atrás eso, así que supongo lo escribiré algún día. Yo creo que hasta mi papá se dio cuenta de que no estuvo bien eso, porque jamás me volvió a tocar ni un pelo, aunque nunca se disculpó, pero puesto que yo tampoco, supongo que estamos a mano.

Ya conforme me fui haciendo mas grande, pues teníamos nuestros desacuerdos, yo creo que a él le avergonzaba que yo no me involucrara en las actividades de la iglesia como todos los demás chamacos de mi edad que asistían, pero tampoco me decía nada. Incluso cuando dejé de ir a la iglesia y que mi mamá insistía en que me obligara a ir o ya por lo menos que me corriera de la casa, mi papá hizo gala de una diplomacia que tenía guardada quien sabe dónde, porque declaró que no tenían porqué tratar de obligarme a creer en nada y que independientemente de compartiera o no las creencias que ellos habían tratado de inculcarme, al final del día eran mis padres, y si no podía esperar comprensión de nosotros entonces de quién mas?

Pasó poco mas de un año antes de que me viniera a vivir para acá, pero creo que desde entonces mi papá y yo nos llevamos mejor que nunca. En ocasiones que he necesitado de alguna opinión, un consejo y hasta instrucciones para cambiar la llave de la regadera que goteaba, invariablemente le hablo a mi papá que siempre tiene un punto de vista, un consejo o la solución adecuada para todo.

Estoy agradecido con quien corresponda (el universo, Dios, el azar o cualquiera que sea lo que mueve los hilos de este mundo) de haber tenido y todavía tener a mi papá conmigo, espero que me dure muchos años mas :-) 

jueves, 6 de junio de 2013

La Chicaracha

La Chicaracha era una compañera de la escuela de inglés a la que asistía cuando todavía estaba en la preparatoria.

Era un poco estrafalaria ella, siempre andaba con muchos accesorios en los brazos y cuello que tintineaban alegremente con cada paso que daba, muy amante de irse a clases en chanclas y vestida con lo primero que encontraba en la oscuridad; solía usar una solitaria liga en sus pelos necios color sirena de película de Peter Pan que no le alcanzaba a aplacar dos mechones de pelo rebeldes que tenía en la frente y que se movían en todas direcciones como si fueran antenas de... Chicaracha.

En las clases no parecía prestar mucha atención, y de hecho varias veces el maestro trató de sorprenderla preguntándole algo referente a la clase y el sorprendido resultaba ser él porque a pesar de que ella se encontrara afanada con un bolígrafo decorándose el dorso de la mano con fantásticos dragones furibundos o alguna versión diabólica de Hello Kitty, jamás perdía el hilo de lo que acontecía a su alrededor a pesar de que parecía estar conectada a la Matrix.

La Chicaracha no le daba la menor importancia a lo que los demás opinaran de ella, prueba de ello es que siguió tan risueña y feliz como siempre aún después de que sus compañeros de la prepa (que de hecho eran casi puros varones) le pusieron el apodo de 'La Chicaracha' y se lo hicieron saber a toda la escuela, siempre tenía demasiadas cosas en la cabeza como para retener información innecesaria e irrelevante como el saber que tenía un apodo (o sea que le valía madres).

No recuerdo que haya tenido dificultad en hacer amistades, siempre encontraba un tema en común para platicar con quien fuera, incluso aquélla vez que un grupo de misioneros bautistas visitaron la escuela, ella platicó, rió, bailó y cantó con ellos, yo creo que es probable que aún los tenga agregados en Facebook hoy en día.

Lo único que le podía llegar a molestar es que alguien se metiera con sus creencias particulares, estaba convencida de que la reencarnación era real y prueba de ello eran los 'Déjà Vu', cuando le dije que eso se podía deber mas al hecho de que efectivamente ya hubiera hecho algo y lo hubiera olvidado o que a la mejor seguía un patrón repetitivo en su conducta y era la primera vez que le prestaba la debida atención me dijo:

-Pues será tu vida aburrida la que es repetitiva!!!-

La Chicaracha era un espíritu libre, tenía curiosidad por las cosas que las demás chicas de su edad no consideraban curiosas y no sentía pena por las cosas que a las demás si las hacían sentir pena.

En una ocasión en la clase de inglés, el maestro nos puso la tarea de describir una tarea y dar las instrucciones para realizarla, obviamente en inglés. El día que le tocaba a ella hacer su presentación llegó con un plátano y un condón. Totalmente inmune a las sonrisas nerviosas de todos los presentes, describió paso por paso desde cómo ir a la farmacia y preguntar cuánto costaba el paquete, como ponerlo y desenrollarlo, hasta como deshacerse del mismo una vez concluido el asunto. Lo que sea de cada quien, dio las instrucciones muy claras y sacó  un 100.

A la Chicaracha solo la volví a ver una vez después de terminar el inglés y la prepa, y fue al fondo de un autobus besándose con un tipo de pelos azules que hacían juego con los suyos color bugambilia. Iba ocupada en lo suyo, así que no quise interrumpirla para saludarla.

Ramona Flowers

Me vino a la memoria porque me topé con un comercial de esta película de 'Scott Pilgrim vs the World', y uno de los personajes le daba un cierto aire a La Chicaracha.

domingo, 26 de mayo de 2013

Mi pasado aleluyo me persigue

Cuando a mi me preguntan si creo en Dios, suelo contestar que no soy religioso, a pesar de que efectivamente, no creo. He descubierto que las personas son mas tolerantes con alguien 'no religioso' que con un ateísta.

A mucha gente (mis padres incluídos) les sigue horrorizando el hecho de que haya dejado 'el buen camino' a pesar de haber pasado parte de mi niñez, mi adolescencia completa y parte de mi juventud como miembro bautizado de una iglesia evangélica de la que deserté apenas conseguí mi primer empleo.

Con todo y que hace AÑOS que no me paro en una iglesia (evangélica al menos), hay cosas que creo no se me van a olvidar nunca. Lo supe porque en estos días compré un iPad para regalárselo a mi mamá, que no sabe ni encender una computadora, así que por lo mismo pensé que un iPad le parecería mas sencillo de utilizar, amén de que ahora podría aumentarle el tamaño de las letras a la biblia con un simple clic.

Una de las cosas que busqué además de apps cristianas, fue música, y contrario a lo que pensaba, sí se pueden bajar torrents de música cristiana; me hice en un ratito de 49 albums. A la hora de subirlos al iTunes hay que checar todo, corregir la ortografía en los nombres (es sorprendente la pésima ortografía que puede tener alguna gente incluso copiando los nombres de canciones directamente de una caja de CD) y porqué no, escuchar las pistas a ver si están bien grabadas y luego...

Fue allí que regresó TODO, cual surimi (diría Ninel Conde). AÑOS Y AÑOS de escenas olvidadas de mi existencia aparecieron como por arte de magia, y encima de todo, recordaba la gran mayoría de las letras de canciones que tenía mas de 10 años sin escuchar; lo peor es que ahora ahí estoy tarareándolas, porque lo que sea de cada quien son bastante pegajosas algunas de ellas. Sin duda mi pasado aleluyo* me persigue, digo, 11 años de educación cristiana y machacante no se olvidan así como así.

Marcos Witt - Alabadle (Buen Recuerdo)

Marcos Vidal - Buscadme y viviréis (Mal, maaaaaaaal recuerdo :-S)

Eso sí, fueron recuerdos de todo tipo, algunos buenos pero también otros MUY, MUUUUUUY malos. Así como a mucha gente 'X' canción le recuerda un episodio de su vida,  pues a mí ciertas canciones cristianas me recuerdan la tristeza, la culpa y la depresión en la que viví durante tantos años por culpas imaginarias que me fomentaban en la iglesia, pero bueno, creo que eso se merecería un post aparte.

Ojo, no estoy diciendo que creer en Dios sea algo malo, es algo que le da sentido a las vidas de millones de personas cada día, pero pues a mi simplemente no me funciona.

Antes solía tener largas discusiones con mis padres acerca de mis ideas y las suyas, pero al final quedábamos igual. Por lo mismo decidí que ya no iba a discutir con ellos acerca de esas cosas, que cada quien crea lo que quiera y ya, además, si mis papás se hicieran ateos, vaya que se iban a aburrir! La iglesia no solo les da un sentido de pertenencia a un grupo, también les provee yo creo el 99% de su vida social :-P

*En México a los evangélicos o en general a cualquier grupo cristiano pero no católico suelen llamarles 'Aleluyas'.

miércoles, 15 de mayo de 2013

El Pinocho

Era un cuate que estaba en la misma secundaria que yo, aunque en turnos distintos, él estaba en la tarde, y aunque nunca lo conocí personalmente, varios de mis amigos estuvieron en su mismo grupo y son quienes me llegaron a platicar dos que tres anécdotas.

El Pinocho (ni supe cual era su nombre de pila) no tenía el don de la belleza, todos los que me han platicado de sus andanzas están de acuerdo en que era bastante feíto. Su principal característica era una nariz prominente, que le hizo merecedor de ese apodo y una voz que tendía mas a lo gangoso que a lo grave y atractivo.

No es él pero era algo mas o menos así.


El deporte favorito de su grupo, era el bullying contra el Pinocho, claro que este cabrón resultó bastante aguerrido y con una autoestima por encima de lo normal, por lo cual cualquier intento de burla respecto a su persona quedaba neutralizado por su actitud innata de 'me vale madre lo que digas', aparte de que manco no estaba, cualquiera que osara agredirlo aunque fuera en broma podía estar seguro que habría consecuencias.

De verdad que a como me platican su historia, yo no entiendo cómo es que aguantaba tanto, porque era un día sí y otro también.

Todo cambió un día lunes, en que el Pinocho llegó con una nueva adquisición a la escuela, unos tenis Jordan que costaban la friolera de $1200 pesos, unos $200 USD o el equivalente de 60 salarios mínimos de la época.

En ese entonces en mi querida escuela secundaria, había dos canchas de baloncesto, una era la cancha fea, que estaba pegada al terregal, y la otra era la cancha VIP, la que tenía iluminación y en donde solían jugar los chicos fresitas o populares de la escuela. Pues lo inaudito, fue cuestión de que vieran al Pinocho con esos tenis y lo invitaron a jugar con ellos, vaya que eran fijados mis compañeros eh!

Otra historia corta que me contaron, fue que en una fiesta, lo retaron a invitar a bailar a cierta chica que estaba cerca de la pista, el Pinocho echando mano de una muy saludable autoestima y buenos modales, le preguntó que si quería bailar. La chica lo miró de arriba a abajo y le dijo haciéndose la chistosa:

-Ay no, estás muy feo!- le dijo de manera cruel y burlona, grande fue su sorpresa porque...
-Y tu has de estar muy guapa hija de tu p*ta madre!- le dijo el Pinocho con su voz gangosa y alejándose dignamente.

Todos soltaron la carcajada, estaba claro quien fue la que quedó mal parada.

Mi amigo que me contó la historia de este cuate, me dijo que se lo encontró años después cuando estábamos en la universidad, y el Pinocho ya era pasante de abogado, se agenciaba unos pesos extras asesorando personas que se querían divorciar.

En estas últimas veces que fui de visita al pueblo, nos pusimos a platicar de aquéllos viejos tiempos de la secundaria, me acordé del Pinocho y le pregunté a mi amigo que había sido de él.

-Que te pasa! que ahora el Pinocho es Juez de lo familiar en X juzgado!

Vaya, nada mal para alguien que lo tenía todo en su contra, mientras tanto me pregunto que sería de todos aquéllos que se burlaban de él inmisericordemente... no hace falta ir muy lejos, los pueden ver en la calle vendiendo naranjas...

Y porqué no planear mi propio funeral?

A veces pareciera que en mi casa no tenemos nada que hacer, así que nos ponemos a platicar de cosas que van desde el 'qué raro que el té de jazmín huela a aromatizante ambiental' hasta el 'cómo quisieras tu funeral?'

Esta última fue la que captó mi atención, mas que nada porque la gran mayoría de la gente le tiene pavor a la muerte. Yo no, me da miedo morirme y dejar desamparados a mis padres en su vejez, pero morirme el hecho de morirme no.

Por eso puedo hablar sin mucha pena acerca de cómo me gustaría que fuera mi funeral.

En general, suele ser la familia de uno quien se encarga de los gastos, los arreglos y demás, porqué no hacerlo uno? Hay muchos lugares donde uno puede ir abonando desde años antes y elegir una caja a su gusto, las flores, el tipo de ceremonia y esas cosas.

Yo ya dije y reitero, no quiero ceremonia, misas de cuerpo presente ni esas cosas que se me hacen tan tenebrosas. Si mis recursos me lo permiten, quiero dejar pagado un salón de eventos con un buffet de costillitas, carne asada y pollo rostizado, donde la gente se sienta contenta, no por mi muerte, sino porque tuvimos oportunidad de compartir un momento de nuestras vidas ellos y yo. Piénsenlo, con la vastedad del universo, no es mucha coincidencia que nos hayamos encontrado en este rincón del cosmos?

Así que me gustaría una celebración de vida, de lo que fui, sin lágrimas y dramas.

Otra cosa que me gustaría hacer diferente a lo que se estila por estos rumbos, es que no quiero ser enterrado; preferiría ser cremado y que mis cenizas se distribuyeran en partes iguales en algunos lugares que ya tengo vistos:


  • El primero sería en mi calle donde crecí, fui feliz por muchos años allí, con todo y que ahora el barrio va en franca decadencia. Aún así, no estaría mal que mi presencia sobrenatural sirviera para espantar vagos y malvivientes, digo, un servicio a la comunidad después de muerto a lo mucho me puede generar buen karma jejejeje

  • El segundo lugar que he elegido, sería el trayecto que hace el tren Chihuahua-Pacífico, específicamente en la sierra de Chihuahua. La razón es que esa ruta la he recorrido muchas veces, con mi familia, con amigos y espero que con el amor de mi vida; hasta ahora solo han sido recorridos felices, ya fuera por vacaciones, algún viaje de la escuela, etc. Creo que a lo que quede de mi le gustaría rondar en esos parajes verdes llenos de pinos tan chingones que hay en esa ruta, y de nuevo, espantar a los narcos que anden haciendo sus maldades por ahí!

  • El tercer lugar sería en el mar aquí en Los Cabos, específicamente en la playa de Palmilla y otro poquito en Bahía Chileno, el motivo es que también aquí he sido muy feliz, ha venido mi familia, mis amigos y es un lugar donde no he tenido sino alegrías. Aquí si me gustaría que mis cenizas se quedaran por puro gusto, sin ánimo de asustar a nadie ;-)


Creo que la razón por la cual no me gustaría tener una tradicional tumba sería porque no tendría quien me visitara, el día que mi familia y amigos que me conocieron ya no estén, mi triste tumba se irá llenando de polvo, amén de que no va a faltar algún hijo de la chingada que pasados 100 años me quiera desalojar para hacer espacio, NEL, de estar fijo en un pedazo de tierra, prefiero andar viajando con el viento y las corrientes de agua, sirve y por lo menos así recorro el mundo, o no? ;-)

Hoy es día del maestro!!!

En México el día del maestro se festeja el 15 de mayo, es una fecha que no es variable, es el 15, caiga el día que caiga. En mis tiempos de estudiante, el mes de mayo era de los favoritos porque había puentes a cada rato; que por el día del trabajo, el 5 de mayo y la batalla de Puebla, el 10 de mayo que era día de las madres, el 15 de mayo que era día del maestro, el 23 de mayo que creo sigue siendo el día del estudiante, etc.

Maestros tuve muchos a lo largo de los casi 19 años que pasé en la escuela, algunos muy buenos maestros, y otros verdaderos enfermos mentales que no me explico como carajos estaban dando clases. Y si les platico de algunos?


  • En el Kínder, no guardo ningún buen recuerdo de ese grupo de brujas menopáusicas, me odiaban porque lloraba mucho, y como no iba a llorar si les tenía miedo? Tache para ellas.
  • En 1ero de primaria, recuerdo a la maestra Galdina, no tanto por sus buenas aptitudes como maestra (aunque si era una buena maestra) sino porque una vez que entré al salón durante el recreo la vi en faldillas/medio fondo, si se iba a cambiar de ropa lo menos que podía hacer era ponerle seguro a la puerta no?
  • En 2do, mi mamá me cambió de grupo porque la maestra estaba embarazada; mi mamá pensaba que cuando se fuera de baja por maternidad, no tendríamos la misma estabilidad con un maestro substituto. En mi nuevo grupo me tocó con la maestra Rosalba, toda una señora, mis respetos para ella.
  • En 3ero, el profe Rafael, excelente maestro, aunque creo que cometió el error de dejarnos tomar confianza, después casi casi le pasábamos por encima.
  • En 4to año el profe Antonio fue un reto, le tenía miedo. No se si sería egresado de alguna academia militar, pero vaya que sabía imponerse, eventualmente nos lo ganamos y nos lo echamos a la bolsa. El problema fue cuando le dio apendicitis y estuvo incapacitado por mas del mes y nos enviaron a una maestra sustituta que bien podría haber sido la institutriz de Hitler, regañona como ella sola y sin ninguna razón en especial, creo que le gustaba inspirar miedo!
  • En 5to el profe Marco, muy buen maestro, aunque quizá nos daba demasiadas confianzas, se ponía a platicarnos santo y seña de sus aventuras, pero luego se molestaba si hacíamos algún chiste o comentario imprudente (éramos niños de 10 años, ya se imaginarán) de lo que nos contaba.
  • En 6to me volvió a tocar con el profe Marco, insisto, muy buen maestro, pero de nuevo el problema de que nos daba confianza y después se enojaba si nos poníamos libertinos. En ese último año se quejaba mucho de mi porque según él, hablaba demasiado, éramos niños profe! Que quería?!!
    Caí de su gracia cuando en un exceso de confianza, le pegué un papel en la espalda que decía 'Patéame', por cierto un mal ejemplo visto en Los Simpson :-P
De la secundaria y la prepa, pues era un maestro para cada materia, como les mencioné antes, había unos maestros excelentes, otros que no tanto, y los menos eran unos que no entendía como carajos estaban dando clases. Uno solía ponerles apodos, o en la mayoría de los casos, eran pasados de generación en generación, algunos de ellos:

  • La momia sexy, una maestra que pasaba de los 60 años pero que gustaba de vestirse con minifalda, blusas escotadas y maquillaje no muy discreto.
  • El Mario Bros, un maestro de matemáticas que era la versión en carne y hueso del personaje de Nintendo.
  • El Caguamón, un maestro de ciencias sociales de rasgos poco refinados, que irónicamente, tenía una hija MUY bonita que iba en el salón de enseguida.
  • La Venada, porque 'no ve nada'; maestra de inglés que usaba unos lentes de fondo de botella la pobre.
  • La Coneja, una maestra muy fecunda que tenía la costumbre de parir una vez al año.
  • El Pelochas, un maestro de dibujo industrial con poco pelo, tenía una boca obscena con la que decía 5 maldiciones por cada palabra neutra.
De la prepa y la carrera también hubo varios, aunque ya no necesariamente tenían apodos, ahí el problema era el mal carácter que pudiera tener cada uno, sobre todo gente tan impredecible como el Krusty (q.e.p.d) y la Hormiga Atómica, una maestra bajita de estatura pero que era capaz de mantener el control con nada mas que su férrea mirada!

Ay que tiempos aquéllos jejejeje, tu te acuerdas de tus maestros con cariño o de plano prefieres olvidarlos? :-P

El Día de las madres

En México nada es mas sagrado que la madre, de hecho es tan pero tan sagrada que no hay insulto peor que decirle a alguien '¡Chinga tu madre!', desconozco si en otros lados exista un insulto similar, pero vendría a ser como el equivalente del conocidísimo 'Fuck you!'.

Tan respetada y adorada como es en nuestra cultura la madre, no podía faltar un día dedicado a ellas en el calendario. Aquí en México se festeja el 10 de mayo, es una fecha fija y no cambia, en otros países creo es el segundo domingo de mayo, pero no, aquí es inamovible desde 1922 creo.

Lo mas normal es que ese día a la mamá le hagan un festejo en casa, con comida de fiesta, pastel, y por supuesto, regalos. Por lo general el festejo se hace en casa de las abuelas y ahí es donde se junta toda la parentela, con hijos, nietos y (cada vez mas seguido) bisnietos. Todo mundo anda en las visitas, por lo que es raro aquél que se le ocurre ir a la escuela, y todavía mas raro el maestro que se presenta a dar clases. No es un día feriado oficial, pero hagan de cuenta que lo fuera.

El primer 10 de Mayo que yo recuerdo, es del del año de 1989, en esa ocasión mi mamá en vez de alistarme para la escuela, alistó una pequeña maleta y en vez de llevarme a la escuela, llegamos a la terminal de autobuses, de ahí nos subimos a un 'camionzote' y ahí te vamos con rumbo a Guamúchil (tierra natal del ídolo Pedro Infante por cierto), ya de ahí caminamos un par de cuadras mas hasta que llegamos a otra mini terminal donde tomamos un camión suburbano que iba 'hasta la madre' de gente donde el chofer traía a todo volumen 'El último beso' (porqué se fueee y porquéee murioóoo, porqué el Señor, me la quitóoo) en voz de una entonces casi desconocida Gloria Trevi. Nos bajamos como una hora después ahí en la entrada del ejido donde vive mi abuela, y empezamos a caminar con rumbo a su casa, el bus pasaba solamente sobre la carretera y la casa de mi abuela quedaba mas o menos retirada.

El rancho aparece en Google Maps!!!


Yo iba bien contento, primero porque no iba a ir a la escuela, segunda porque me emocionaba mucho ver a mi abuela (por alguna razón las abuelas parecen quererlo a uno mucho sobre todo si vive lejos) y tercera, porque me la iba a pasar juegue y juegue con mis primos del rancho.

Aquéllos tiempos sencillos en que lo único que se ocupaba para jugar era estar con los pies en el suelo, yo era feliz de tener muchos lugares a donde correr, donde esconderme, montones de árboles a los cuales trepar y de donde cortar: naranjas, ciruelas, toronjas/pomelos, mangos, tamarindos, naranjitas, granadas, higos y guayabas; cualquier rastro de estreñimiento que trajera al llegar al rancho habría desaparecido para cuando nos fuéramos. Eso si, recuerdo que había muchos bobitos, esos insectitos que andan volando y que les encanta acercarse a los ojos, a veces se me ponían tan rojos que mi mamá terminaba untándome hasta terramicina.

En la casa de mi abuela se armaba un ambientazo de fiesta, aquí en este país y sobre todo en mi natal Sinaloa, cualquier pretexto es bueno para pistear (beber alcohol), y no faltaba quien empezara a brindar por la salud de sus mamacitas desde el 9 de mayo por la noche, y mis tíos por supuesto, no iban a ser la excepción.

El mero 10 de mayo era una revolución en el pueblo, música a todo volumen con 'las mañanitas', y los hijos ausentes regresando con todo y familia para felicitar a la abuela. Era un gentío entrando y saliendo de la casa desde temprano en la mañana hasta la noche; mi abuela había tenido 9 hijos (aunque mi santa tía Maricela ya no estaba) que habían salido muy buenos para procrear, a eso agréguenle otros 4 o 5 hijos adoptivos que había criado, pues era una celebración en grande.

La escuela del rancho hacía un festival donde había bailables, sketches y en esa ocasión hasta una función de teatro guiñol, la entrada era libre, aunque por lo general solo iban las mamás y los niños, los señores preferían quedarse en casa bebiendo cerveza como si lo fueran a prohibir.

En esa ocasión creo que hasta mi mamá salió ganona en la rifa de la escuela, por ahí en mi casa debe andar una foto de ella recibiendo unas servilletas de cocina envueltas en celofán amarillo, y hasta eso que duraron varios años en la casa.

Al día siguiente, 11 de mayo emprendimos el regreso, en un bus igual de abarrotado de gente que veníamos. Llegando a casa mi mamá vio con horror que mi hermana había re-acomodado los muebles de la sala y hecho un movedero de cosas que tuvo que poner en orden antes de sentarse a descansar.

Al día siguiente resultó que allá en el rancho me habían contagiado de paperas y no fui a la escuela en una semana ;-)

sábado, 20 de abril de 2013

Cuando te toca te toca

Hace tiempo que le dejé de temer a la muerte. No tengo hijos que mantener (que yo sepa) ni responsabilidades mas que con mis padres y en realidad esa es mi única preocupación referente a la muerte, ¿quién se hará cargo de ellos cuando sean mayores? pero de ahí a lo que pueda pasar conmigo y con mi alma/espíritu/energía/etc, pues no, la verdad que no. 

Viví durante muchos años de mi vida temiéndole al fuego del infierno, o mas específicamente al 'Lago de fuego que arde con azufre', pero la verdad desde que me alejé de la religión en la que crecí y me dejé de telarañas mentales y de vivir con reglas y supersticiones de hace 2 mil y cacho de años que simplemente ya no corresponden a la realidad actual, vivo mejor. 

Tengo mayor paz interior ahora que soy ateo/agnóstico/loquesea y me hago responsable de mis actos y las consecuencias de los mismos, que antes que iba regularmente a la iglesia, leía la biblia y oraba para evitar que el Diablo/Enemigo me corrompiera.

En fin, el caso es que la muerte es la cosa mas certera y absoluta que puede haber en esta vida, es pareja con todos. Ricos, pobres, clasemedieros, justos y pecadores; todos eventualmente moriremos y pues no hay nada que podamos hacer para evitarlo, tal vez retrasarlo, pero a veces ni así, cuando te toca te toca.

Esto me quedó muy claro hace varios años, en una ocasión que el Coconut, el gato de la casa, atrapó a un pajarito y lo traía entre los dientes, saboréandose por adelantado el festín que se iba a dar. Yo venía de las tortillas o de algún otro mandado y lo vi. Rápidamente se lo quité antes de que lo matara y al gato lo dejé afuera en la calle. El Coconut no se quedó muy contento, lo podía oír chillar y maullar afuera, BIEN ENCABRONADO porque yo le había quitado su desayuno.



Al pobre pajarito ahí como pude le limpié las heridas y lo cuidé  hasta que empezó a mostrar signos de mejoría. Ya después de unos días el pajarito se puso mas vivaracho, ya andaba por la casa, comía, pero no volaba. Lo tuve mas o menos como una semana, ya mi mamá se empezaba a molestar porque el avechucho se cagaba donde le daba la gana y yo le decía:

-Ay Amá, cómo es de mala! el animalito no sabe!-
-Pues si, no sabe, pero que casualidad que nomás le gusta cagarse en la ropa limpia!-

Pasaron unos días mas y el pajarito ya empezaba a querer volar, primero tramos cortos de unos dos o tres pasos, y ya después empezó a agarrar fuerzas y volaba unos cuantos metros dentro de la casa.

Un buen día finalmente lo saqué al frente de la casa a ver si por fin levantaba el vuelo. También estaba al pendiente por si al Coconut se le ocurría hacer acto de presencia, pero pues después de un rato y de ver que el avechucho nomás no despegaba, lo volví a meter a la casa y cerré la puerta mosquitero del frente.

Al poco rato que me mandó mi mamá a la tienda, vi un reguero de plumas y dos patitas tiradas ahí afuera de la casa. Al principio descarté que fuera el pajarito que había estado cuidando, porque recordaba haber cerrado la puerta y el Coconut no se había metido a la casa, pero después de estarlo busque y busque por todos lados y que no aparecía, pues no hubo mas que aceptar lo que sonaba mas lógico. La puerta mosquitero de la casa, no cerraba herméticamente, siempre quedaba una hendidura por abajo de la puerta, a la mejor no suficientemente grande para que el Coconut se metiera, pero si lo suficiente para que el condenado avechucho saliera a reencontrarse con la muerte en las fauces del minino! 



Ya al asomarme bien, me encontré al Coconut detrás de una maceta tomando el fresco, y relamiéndose los bigotes el hijo de la chingada. Tanto estar cuidando al avechucho aquél para que lo único que consiguiera fuera engordarlo y que el pinche gato finalmente se lo comiera! Por lo menos le amargué la comida, le tocó una patada bien dada para que no volviera en el resto del día.

Mientras tanto La Muerte seguramente observaba desde arriba de un árbol, cagándose de la risa.

jueves, 18 de abril de 2013

Mitológica Ella

La primera vez que vi a la Mitológica Ella, pensé que era un chico con el pelo negro y muy grifo, tipo el Tíbiri-Tábara o el Negrito Bimbo. Yo confieso tener un prejuicio contra los hombres greñudos, no sé porqué, pero a veces desearía traer una maquinita de esas para cortar el pelo y raparlos al cero.
Quizá sea porque yo asocio el pelo largo en los hombres a la falta de higiene. Aclaro que es un prejuicio mío y nada mas eh, no tiene nada que ver con la realidad, por eso son prejuicios.



En fin, cuando nos mudamos por enésima vez hace 5 años, terminamos en el barrio donde estamos ahora actualmente, y comencé a ver mas seguido a la Mitológica Ella, solo que ahora se le notaba mas no sé, mas femenina, se contoneaba mas y si mal no recuerdo, fue cuando le empezaron a salir (.  )(  .)

Era evidente entonces que la Mitológica Ella era un chico en proceso de convertirse en chica, y yo decía -ah pos bien por ell@, que es capaz de lo que sea con tal de lograr su sueño-. Sin embargo, algo pasaba con la Mitológica Ella, de repente como que se estancó.

En las noches cuando regresamos del trabajo, pasamos por enfrente de un mini super, y siempre vemos a la Mitológica Ella, platicando con dos tres borrachines que se juntan a beber ahí afuera, pero de un tiempo acá la vemos, irónicamente, cambiada; mas flaca, mas cansada, mas ojerosa y sin ilusiones. En una palabra, avejentada, y eso que antes no aparentaba tener ni 20 años.

Definitivamente la excelencia no resultó ser el fuerte de la Mitológica Ella. Digo, si vas a pasar por burlas, bromas, incomprensión, discriminación por perseguir algo que se quiere pues mínimo que valga la pena el sufrimiento. Pero pasar por todo eso (tratamiento hormonal de por medio) para terminar convertida en una mujer fodonga? No me chingues! Si vas a ser Mujer, pues se mujer, arréglate, maquíllate, vístete bien, ¿Qué es eso de andar a las 12 del día en la calle con pantuflas y una camiseta mugrosa? o en la noche con pantuflas y una camiseta mugrosa y con el pelo quemado por un mal tinte? No, de plano que no.

 



Cualquier persona que me conozca, sabe que soy entre otras cosas ateo/agnóstico, defensor de los derechos de las mujeres y las minorías y que trato de mantener una actitud de mente abierta, no creo que las personas estén mal de la cabeza por pensar distinto a mi, al contrario, es algo que celebro porque eso impide que yo también me vuelva dogmático, y al haber pluralidad de ideas, pues uno se expone a mas y mas puntos de vista, y por lo mismo es capaz de ponerse en los zapatos de alguien mas con mayor facilidad, por lo mismo no critico que la Mitológica ella sea un transexual, al fin y al cabo su condición de ser una mujer nacida en el cuerpo de un hombre no fue su elección, pero la fodonguez SI que lo es!

Hace muchos años vi una película de Pedro Almodóvar, 'Todo sobre mi madre', uno de los personajes mas graciosos y entrañables era precisamente un transexual, la Agrado, y creo que este monólogo que se avienta resume todo de una manera excelente.



"Por causas ajenas a su voluntad, dos de las actrices   que diariamente triunfan sobre este escenario hoy no pueden estar aquí, pobrecillas. Así que se suspende la función.

A los que quieran se les devolverá el dinero de la entrada pero a los que no tengan nada mejor que hacer y pa' una vez que venís al teatro, es una pena que os vayáis. Si os quedáis, yo prometo entreteneros contando la historia de mi vida.

Adiós, lo siento, eh (a los que se marchan).

Si les aburro hagan como que roncan - así: Grrrrr - yo me cosco enseguida y para nada herís mi sensibilidad (eh, de verdad!).

Me llaman la Agrado, porque toda mi vida sólo he pretendido hacerle la vida agradable a los demás.

Además de agradable, soy muy auténtica. ¡Miren qué cuerpo! ¡todo hecho a medida!: rasgado de ojos 80.000; nariz 200, tiradas a la basura porque un año después me la pusieron así de otro palizón... Ya sé que me da mucha personalidad, pero si llego a saberlo no me la toco. Continúo, Tetas, 2, porque no soy ningún monstruo, 70 cada una pero estas las tengo ya superamortizás. Silicona en labios, frente, pómulos, caderas y culo. El litro cuesta unas 100.000, así que echad las cuentas porque yo, ya las he perdío... Limadura de mandíbula 75.000; depilación definitiva en láser, porque la mujer también viene del mono eh, bueno, ¡tanto o más que el hombre! 60.000 por sesión. Dependiendo de lo barbuda que una sea, lo normal es de 2 a 4 sesiones, pero si eres folclórica, necesitas más claro... bueno, lo que les estaba diciendo, que cuesta mucho ser auténtica, señora, y en estas cosas no hay que ser rácana, porque una es más auténtica cuanto más se parece a lo que ha soñado de sí misma.".

Si uno sabe hacer las cosas bien, pues hay que hacer las cosas excelentemente bien. Si no sabes y lo haces mal, pues hay que hacerlo lo mas excelentemente mal que se pueda no?

P.D. Lo del nombre de 'Mitológica Ella' salió a discusión sobre si era o no políticamente correcto llamarla 'quimera' como normalmente les dicen en México a los transexuales. Al final quedamos que sonaba mejor y mas classy :-P

domingo, 14 de abril de 2013

Alien Family

Yo, al igual que el 99.999999999999999999999999999999% de la población en México, tengo parientes en Estados Unidos. En el caso de mis parientes, algunos de ellos emprendieron la aventura allá a mediados de los 90's y no les fue tan mal, eso animó a otros de mis parientes a buscarse un futuro en los Yunaites.

Mas o menos por ahí a finales del 2000 o principios de 2001, mi tía Adelita decidió que ya había tenido suficiente de estar batallando continuamente, pues por mas que se partía el lomo en el trabajo, nomás no lograba salir de aprietos económicos.

Mi tía siempre fue muy trabajadora, hasta donde sé, no tuvo el apoyo formal de un marido, pues el papá de mi primo era un señor casado, y el papá de mi prima resultó ser un verdadero hijo de la chingada que le hizo la vida imposible a mi tía hasta que finalmente logró divorciarse de él.

Con todo, mi tía hacía lo que fuera por sus hijos, nunca les faltó comida en la mesa, ni regalos en navidad, ni los trajo jamás mugrosos ni mal vestidos. Pero tarde que temprano la gente se cansa de siempre estar viviendo al día, y mi tía no fue la excepción; un buen día alguien la alborotó para irse a los Estados Unidos y ella aceptó.

Tomó un autobús hasta la frontera en Nogales, y allí ya la habían conectado con un 'coyote' o 'pollero', que la iba a cruzar por el desierto hasta Phoenix, Arizona; por cierto uno de los cruces mas peligrosos que existen para los ilegales, pero cuánta no será la desesperación que se juegan la vida sin pensarlo.

Nos platica mi tía que del grupo en el que iba, solamente ella y el pollero llegaron a su destino final después de varios días caminando por el desierto, 'con las patas destrozadas', pero llegó. La demás gente se fue quedando en el camino cuando no les podían aguantar el paso y no les quedaba de otra que regresar.

Allá una amiga de ella la estaba esperando y después de descansar un par de días, le consiguieron un trabajo limpiando casas y empezó a juntar algún dinero para pagar lo que le había cobrado el 'coyote' y de ahí para traerse a sus propios hijos, pues esa era su tirada desde el principio.

Poco después uno de los gringos para los que trabajaba, la contrató para cuidar a su tía, una señora ya mayor que vivía con él. El trabajo era mas estable, ya no gastaba en renta y le pagaban mejor. 

El gringo estaba encantado de la vida porque mi tía además de cuidar a la señora, hacía las compras, cocinaba (decía el gringo que antes solo comían sándwiches) , lavaba la ropa, y bueno, le llevaba la casa. 
Lo que sea de cada quien, mi tía era una de esas señoras que saben hacer TODO, cocinar, coser, cortar el cabello, escribía a máquina en una época en que no cualquiera sabía mecanografía y bueno, palabras mas, palabras menos, el gringo terminó enamorándose de ella y le pidió que se casara con él.

Eventualmente mi tía logró llevarse a su familia a vivir con ella en Estados Unidos. Mi prima terminó el primer año de la preparatoria y en cuanto terminó, cruzó con visa de turista pero ya no regresó. Mi primo no consiguió el visado porque tenía poco en el trabajo y no era precisamente un trabajo de ensueño, así que no hubo mas remedio que cruzar por el desierto, fue una travesía igual de horrible y a la mejor peor que la de mi tía porque el grupo con el que iba se perdió en el desierto y tardó mas de la semana en llegar, mi tía estaba desesperada porque no supieron de él por casi una semana, pero por suerte llegó finalmente.

El caso de la esposa de mi primo y su hija estuvo entre sencillo y truculento. La esposa pasó con los papeles de mi prima, para lo cual se tuvo que teñir y cortar el pelo y maquillarse para parecerse lo mas posible a ella; según entiendo, cuando cruzan en auto y en horas pico, los de inmigración a veces lo único que hacen es contar los pasaportes y el número de personas que van en el auto, si coinciden, pues pásenle!. Tuvo suerte, no le preguntaron NADA.

Para lograr cruzar a la niña, fue un poco mas elaborado lo que hubo que hacer. Al no tener papeles ninguno de ellos, era obvio que no le iban a dar una visa, así que mi tía consiguió con sus conocidos los papeles de una niña de la misma edad pero que había nacido en Estados Unidos y se los mandó a mi abuela que vive en Chihuahua. Mi abuela hacía tiempo que tenía visa de turista por lo cual podía ir y venir sin mayor problema (la gente mayor y los estudiantes consiguen las visas de turista sin mayor problema). 

La idea de mi tía era que mi abuela cruzara la frontera con la niña, y dijera que era su bisabuela, que la niña y sus padres habían venido a una boda pero que ellos se habían regresado antes por cuestiones de trabajo, y ella solamente la llevaba de regreso. Un problema era que la niña se llamaba Samara y los papeles decían 'Allyson', así que desde un mes antes la tuvieron que convencer de que ya no se llamaba Samara sino 'Allyson', pero necia como ella sola, la niña decía que se llamaba Samara y que si le preguntaban como se llamaba iba a decir que Samara. Al final la tuvieron que amenazar con 'Si no dices que te llamas Allyson entonces ya no vas a poder ver a tu papá!', fue apenas así que empezó a responder por el otro nombre. De cualquier manera, por si acaso, mi abuela le dio a beber un antigripal disuelto en jugo de naranja para que se durmiera y no diera problemas, y lograron cruzar sin mayor inconveniente.

Obvio que todo mundo quedó horrorizado cuando se enteraron, ¡¿cómo era posible que mi tía pusiera en riesgo a mi abuela?!, que si acaso no sabía que la podían echar a la cárcel por tráfico de menores y demás. Lo bueno es que al final se reunieron todos allá en Phoenix, en tiempos en que todavía era relativamente sencillo conseguir empleo para los ilegales.

Mi tía creo que a finales de ese año se casó con el gringo, aunque no le duró mucho el gusto de tener un matrimonio feliz. El señor al poco tiempo enseño el cobre, nomás se enojaba y amenazaba a todos con que iba a llamar a los de Inmigración. Aparte al señor este se le agravó el enfisema que padecía, y ya después mi tía tuvo que cuidarlo, llevarlo al hospital a sus citas, etc. Con todo, el gringo era bastante cabroncito, mi tía volvía a tener la misma mala suerte que con sus parejas anteriores.

El acabose llegó una ocasión en que mi tía estaba haciendo un pozole para la comida, pero como tenía visitas, estaba muy entretenida platicando afuera en el patio tomando el fresco. Llegó el momento en que el pozole se empezó a quemar y la casa se llenó de humo, el gringo le habló a la policía y la acusó de quererlo matar. Ahí fue cuando mi tía mejor se separó del gringo, una cosa es que tuvieras tus desacuerdos con alguien y otra muy distinta que te acusen de intento de asesinato.

Al poco tiempo el gringo pasó a mejor vida, solo, los hijos que tenía el gringo no lo frecuentaban y solo aparecieron al final para reclamar la herencia. Mi tía a pesar de ser su esposa legalmente (se habían casado en Las Vegas), no recibió ni un centavo, aún cuando el abogado le dijo que tenía derecho a recibir una parte, pero ella dijo que no, que cuando se casó con él no había sido por dinero y que si lo había dejado en el peor momento no iba a andar de interesada ahora que había muerto.

Ahora ya hace cerca de 13 años que mi tía vive por allá y a su familia se le agregaron otras dos nietas que ya nacieron en Estados Unidos, ahora que vinieron mis papás, me platicaron que por fin está arreglando sus papeles y que a ver si para este año se le hace volver a su tierra. Ojalá que pueda.