En la secundaria donde yo estudié, trabajaba el profe Cedano. Era el maestro de educación artística y lo mas parecido a una leyenda viviente que había conocido para esos años.
No había persona que hubiera estado en esa secundaria que no conociera el peculiar método de enseñanza del profe Cedano, era de esas pocas personas que o las amabas o las odiabas, y vaya que era odiado...
Tenía la característica de ser muy prepotente en su hablar, como si fuera todopoderoso y el amo y señor de las artes de la secundaria, eso si, era muy chistoso. Una clase con él era garantía de que te ibas a partir de la risa con sus ocurrencias.
En las clases de danza salía con cosas como:
-Si túuuuu la del fondoooooo! Muévete como mujeeeer!!! Con coquetería!!!- y se ponía a darles el ejemplo acerca de cómo se debían mover las mujeres, y lo peor del caso es que se contoneaba mejor que muchas!
-Ivy! Mueve las nachas! Pareces viejita!!!!-
Cuando empezaba el ciclo escolar, montones de gente se arremolinaba junto a las ventanas del aula donde el profe Cedano se presentaba por primera vez con los alumnos de primer año. Siempre comenzaba con:
-Me llamo JACOBO CEDANO ROJAS-ROJAS CEDANO JACOBO-CEDANO ROJAS JACOBO-JACOBO ROJAS CEDANO-ROJAS CEDANO JACOBO-CEDANO JACOBO ROJAS! Se los digo de todas las maneras posibles para que se aprendan mi nombre de una vez!-
El profe como les dije, era chistoso para hablar y no se detenía de decir lo que pensaba del mundo y de la vida. Se jactaba también de que en los treinta y tantos años que tenía de dar clases, nadie jamás lo había podido obligar a que le pusiera nota aprobatoria a alguien que no se lo mereciera:
-Y de una vez se los diiigoooo, en mi clase el que no trabaje NOOO PASAAA, así sean hijos del presidente de la república y aunque venga en persona con sus escoltas y con la banda presidencial puesta y me ordene que los pase, si ustedes no trabajaron en mi clase, NO VAN A PASAR. Igual si son hijos de un narco y viene su papá con una cuerno de chivo (AK-47) a hacerme -RaTaTaTÁTaTaTÁTaTaTÁaaaa (emulando los balazos), yo me pongo mi chaleco antibalas y le hago JaJaJaJÁJaJaJÁJaJaJÁaaaa!-
En su clase era exigente, si uno era cumplido con las tareas y los trabajos pues no había nada que temer, pero AY de aquél que fuera flojo, que no le entregara tareas, que tuviera faltas, porque entonces si te agarraba de encargo y no había modo de que te dejara en paz.
En mi grupo solo recuerdo que se haya ensañado con 3 personas:
El Rubén (mejor conocido como 'La verruga asesina' por cuestiones que no analizaremos ahorita), era bastante cuachalote (sucio) para entregar los trabajos o las láminas que el profe encargaba, varias veces me tocó escuchar al profe gritar a la hora de revisarle la tarea:
-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARGH!!! Qué es esto?!!!!!! Quítelo de mi vista, ME LASTIMA LOS OJOS!!!!-
El Rubén no duró mucho, su mamá lo cambió de escuela antes de terminar el año. Creo que gran parte de que el Rubén fuera malo para la escuela tenía mucho que ver con el hecho de que su mamá INSISTÍA en ir a llevarlo hasta el salón de clases personalmente pese a que tenía 13 años y a veces quedarse TODO el día en la ventana observándolo y porqué no? Interrumpiendo la clase para hacer sus observaciones. Tal vez a la señora nunca se le ocurrió que su hijito quizá hubiera sido mas bien portado y aplicado en la escuela de no haberse visto obligado a dar la imagen de problemático y rebelde para contrarrestar el hecho de que todo mundo lo consideraba un 'hijo de mami'.
Otro repudiado era el Paul, un ente chaparrito y moreno, que casualmente era hijo de un maestro de ahí de la escuela. El Paul era algo así como una versión precoz de un rockero anti-sistema, simpatizante de todo lo oscuro y malvado. Yo me sentaba junto a él en el salón y constantemente debatíamos acerca de cosas como el infierno (yo estaba en pleno apogeo de mis años fanáticos-evangélicos), el satanismo y Los Simpson. El profe no lo podía ver ni en pintura porque nunca hacía las tareas, era apático en todas las actividades que nos pusieran a hacer y regularmente faltaba a clases. Al final del año el profe lo vio tocando con un grupo de rockeros y puesto que para él la música (del género que fuera) era arte, le dio créditos extra y pasó el extraordinario sin problemas.
Otra que tuvo problemas en mas de una ocasión fue
la Azucena. La verdad es que la Azucena tenía ciertos problemas con la autoridad y le gustaba desafiar a este profe en particular ya fuera no entregando las tareas, faltando a clases por estar afuera besuqueándose con el novio de turno o ya cuando menos llegando tarde.
Recuerdo particularmente una ocasión en que ya estábamos en segundo año, y para variar, la Azucena llegó tarde a la clase, ya el profe hasta había pasado lista cuando se planta la Azucena en la puerta:
-Azucena! Porqué llega usted tarde? como de costumbre!-
-Aaay profe, es que estaba esperando a que llegara la enfermera ahí en el consultorio-
-Y para qué necesitaba a la enfermera?-
-Es que me dolía la cabeza y alguien me regaló una aspirina, pero necesitaba un cono de papel para tomármela-
-Y porqué no hizo usted uno con una hoja de papel?!!!!
-Ay pues es que yo no sé como se hacen los conos con una hoja de papel profeee- le contesta la Azucena ya casi a punto de estallar de la risa.
-Azucena, TODO mundo sabe como hacer un cono con una hoja de papel! Eso se lo enseñan en el kínder!
-Aaay profe, es que yo no fui al kínder, entre directo a primero de primaria :-P-
-Ah si, muy lista usted Azucena! Pues a mi clase no va a entrar y de una vez le digo que está reprobada para este bimestre, y usted reprueba no porque sea tonta o burra, sino porque es floja, y de una vez entienda que aprenda que el que ríe a lo último, ríe mejor JA JA JA JA JA-
- (y la Azucena) Ja Ja Ja Ja Ja!
-(y el Profe otra vez) JAA JAA JAA JAA-
-(y la Azucena) Jajajajajajajajajaja- y desapareció rápidamente dejando al profe Cedano sin la última palabra.
Claro, la Azucena reprobó al final del año, el hecho de que su mamá fuera maestra ahí en la escuela no la hacía merecedora de un tratamiento especial, se tuvo que aplicar en la escuela de verano y vaya que sufrió para que el profe Cedano finalmente le pusiera un 6 ya casi para entrar a tercer año. Uno pudiera pensar que odiaba al viejo, pero curiosamente la Azucena una vez que le pregunté sobre eso me dijo que no, que hasta estimaba al profe, ya que era de las pocas personas que conseguían hacerla reír.
Había otras personas que no se lo tomaban con tanto humor como la Azucena cuando el profe los reprobaba. Cedano tenía un largo historial de problemas con alumnos, padres de familia, hermanos de alumnos, tíos de alumnos y demás parentela que no sabían aceptar una crítica (o una mala calificación). La verdad es que yo JAMÁS vi que el profe reprobara a alguien sin justificación, no importaba que no fueras el mejor dibujando/pintando, haciendo artesanías o redactando un trabajo sobre las bellas artes, si tú entregabas las tareas el día y la hora que el profe decía, aprobabas y ya. Claro, nunca faltaba el huevón (flojo) que si le decían que el martes, insistía en entregar el miércoles, y si el profe no le recibía la tarea un día después era un -Pinche viejo mamón!- y lo peor es que había padres que apoyaban a sus hijitos con esa actitud.
Una vez en una clase -Ya va a terminar el año, así que de una vez les digo, a los que andan mal, APLÍQUENSEEEEEE, no hay ninguna necesidad de que anden batallando con exámenes extraordinarios, porque de una vez les digo, que si reprueban, VAN A SUFRIR, y no me importa que traten de tomar represalias como aquél chamaco que lo reprobé y fue y le aventó un ladrillo al cristal de mi camioneta. Aparte de tonto en mi clase, también resultó ser tonto allá afuera porque mis vecinos lo vieron y me dieron su descripción y hasta las placas del auto al que se subió y lo expulsaron de la escuela!- Al final todos pasamos menos la Azucena y el Paul.
Ya para tercer año, la clase nos la iba a dar la maestra Alma , claro, solo los primeros dos meses del ciclo escolar porque tomó la baja por embarazo (de ahí que le apodaran La Coneja, al parecer tenía la costumbre de parir una vez al año). Después nos asignaron a la maestra Ruth (era medio iracunda, de ahí que nosotros le dijéramos 'La maestra GRRRRuth'), el caso es que las clases que daban no se comparaban al ambientazo que había con el profe Cedano.
Hoy ya son casi 20 años desde que yo llevé clases con este maestro, y desconozco si sigue en activo, lo mas seguro es que sí, pues para cuando yo entré a la secundaria, ya tenía trabajando mas de los 30 años requeridos para jubilarse y no se le veían intenciones de querer hacerlo. A la mejor y es de esas pocas personas que trabajan por gusto y para no volverse mas locas.
Aquí les dejo una foto que salió en el periódico hace poco, está IDÉNTICO a como lo recuerdo, no cabe duda que hay gente que es traga-años. En fin, esperemos que nos dure muchos años mas, en estos tiempos está difícil encontrar un maestro que sea capaz de dejar una huella en decenas de generaciones, que siga siendo tema de conversación entre gente que se reúne 20 años después de haber salido de la escuela y que sigan causando risa sus ocurrencias como si las hubieras escuchado apenas ayer.
Profr. Jacobo Cedano Rojas