Por allá en mis años en que todavía estaba joven, no tan feo y no tan gordo, cada verano mis padres me enviaban a la ciudad de Guadalajara, a un congreso de adolescentes aleluyas.
El viaje estaba chido, la estadía, aunque breve, era la diversión concentrada de todo un año en mi aburrido pueblo, y pues el regreso, aunque un poco mas cansado, era una de las partes mas entretenidas del viaje.
En una de esas ocasiones, Claudio, nos venía platicando de un libro que había leído, que no se acordaba como se llamaba, pero que estaba muy entretenido. Para nosotros que éramos fieles creyentes en demonios, maldiciones, brujería y anexos, la historia nos cautivó, pero como Claudio tenía mala memoria para los títulos de los libros, no supimos como se llamaba.
Algunos meses después, mi hermana llegó a la casa con un libro que le había prestado una amiga (hermana de Claudio) y casualmente resultó ser el de la historia que me habían contado. El libro comenzaba con esta frase:
'Este puede ser uno de los libros más difíciles que hayas leído jamás. Satanás NO QUIERE QUE LO LEAS!'
Y como a mi cualquier cosa que me dijeran que no quería que hiciera era un reto, pues me apoltroné en el sillón durante las siguientes 5 horas y lo leí completo de un tirón.
El libro narraba la historia de una doctora llamada Rebecca Brown (Ruth Bailey), que trabajaba en un hospital en algún lugar del medio oeste de Estados Unidos. Todo transcurría normal hasta que un día le cae una paciente que se salía un poco de los estándares que ella estaba acostumbrada a ver. Resulta ser que la paciente estaba endemoniada, así tal cual, y todos sus padecimientos eran ocasionados por los mismos demonios que vivían dentro de ella. La doctora Rebecca consiguió hacer migas con esta paciente, Elaine, y comenzó a ministrarle, de modo que Elaine terminó pasándose del lado del mal hacia el lado de Jesucristo.
En los capítulos siguientes, Elaine le fue contando su historia a la doctora Rebecca, acerca de como había nacido con una deformidad y que una señora misteriosa se había acercado a su mamá para ofrecer correr con los gastos de cualquier operación que ella necesitara para corregir el problema, con la única condición de que le permitieran sacarle un poquito de sangre (sin especificar para qué), y que desde entonces, una secta satánica la había tenido en la mira, y que a los 16 años la reclutaron para que formara parte de ellos.
Con el tiempo, Elaine llegó a ser una hechicera muy poderosa dentro de la secta, tanto que terminó convirtiéndose en la suma sacerdotisa de la misma y eventualmente, en la esposa principal de Satanás en Estados Unidos.
El libro da muchos detalles acerca de como operaba la secta, que trucos usaban para atraer nuevos miembros, detalles de como Elaine fue adquiriendo sus poderes, de como se casó con Satanás y sobre todo como hacían 'guerra espiritual' contra los miembros de las iglesias cristianas, mismas que infiltraban y destruían desde adentro, etc, etc.
Finalmente se narra todo el circo, maroma y teatro que tuvieron que hacer para poder liberar a Elaine de todos los demonios que había ido acumulando con el tiempo. Según la autora, mientras mas demonios tiene una persona, mas poderosa se vuelve espiritualmente hablando. Tipo que cuando dos brujas se pelean a muerte, la que gana se queda con los demonios de la otra.
Cuando recién lo leí, me quedé en shock, pues había dado con información que me permitiría advertir a mis amigos que el halloween no era cosa de juego además de nuevas historias que contarles y capturar su atención jejejeje
El libro en si no tiene desperdicio, está muy entretenido (si les gusta leer historias de este tipo) y aporta alguna que otra información útil para quien creen en estas cosas. Claro, años después, investigando un poquito mas, resultó que a la doctora Rebecca Brown le habían quitado su licencia para ejercer medicina debido a que estuvo a punto de matar a una paciente suya, llamada Edna Moses (verdadero nombre de Elaine),al administrarle un medicamento peligroso, en dosis muchísimo mas altas de lo recomendado. El argumento para retirarle la licencia también había sido que la doctora padecía de delirio de persecución y un poco de esquizofrenia. La doctora se defendía diciendo que las personas que la acusaban eran miembros de la secta que curiosamente siempre ocupaban posiciones clave dentro del gobierno, iglesias y demás grupos de influencia.
Ahí les proporciono el enlace para descargarlo si alguien gusta hacerlo, como dije antes, el libro es entretenido, y si se lee como una obra literaria mas, sin prejuicios y sin tomárselo muy en serio, resulta muy ameno, aparte de que para este día de brujas tendrán mas historias que contar ;-)
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